Hace poco terminé de leer Yes Please! de Amy Poehler y el libro entero es una serie de piensos que he rumiado durante toda mi vida y que ahora entre risas y lágrimas, leí en voz de alguien más.
Una de esas ideas es que los viajes en el tiempo existen y acabo de hacer uno.
Hace poquito más de un año, escribía en este blog todas las cosas que se habían ido con el aparente trabajo de mis sueños y lo bonita que era la vida desempleada. Y sí, fue un mes que necesitaba pero también tenía demasiadas preguntas e incertidumbres profesionales en mi mente.
Luego vino un año que fue como meterme a una montaña rusa en la oscuridad en el que aprendí muchísimo y sufrí otro tanto. (De las que pronto nos reiremos todos juntos en este blog).
También pasé por un writers block de 365 días que terminó el sábado que vi a Metric en vivo por tercera vez, y me acordé de esa parte de mí que necesita sentir que está creando algo y de lo mucho mucho, que amo la música.
Esa debe ser una buena señal.